Reseña práctica de campo Recursos Naturales marzo 2017.

Este año los alumnos del Módulo de Recursos Naturales de tercero de secundaria, pudieron visitar diferentes sitios que permitieron comparar aspectos naturales, ambientales, sociales y culturales desde distintas perspectivas. Esta práctica comenzó con una visita a la planta de tratamiento del Lago de Texcoco, que es administrada por CONAGUA. La visita representa para los alumnos una experiencia fuera de lo común, pues implica el acercamiento al problema de las aguas residuales, las cuales están altamente contaminadas. Son toneladas de basura que se aprecian en el canal de aguas negras y son fuertes los olores que se perciben en las distintas etapas del proceso. A pesar de este duro contacto con la realidad, los alumnos pueden percibir la importancia del trabajo de estas personas, así como las actividades que resultan en beneficio de toda la sociedad.

Posteriormente los alumnos visitaron Zacatlán de las Manzanas, pueblo mágico del estado de Puebla. Algunos de los lugares más representativos que pudieron disfrutar en la zona fueron el Valle de piedras encimadas, sitio privilegiado donde buena parte del año y durante algunas horas del día la neblina cubre el valle dándole un aspecto mágico y misterioso; el centro de Zacatlán, con su kiosko, su vitromural “Vivir en el universo náhuatl” y el Paseo de la barranca de los jilgueros, con su impresionante vista llena de vegetación; y a unos kilómetros de Zacatlán, el ecoparque Tuliman, manejado por la comunidad, es una zona boscosa cuyo principal atractivo es una gran cascada. En estos lugares los alumnos pudieron darse cuenta que hay una estrecha relación entre la naturaleza y los humanos que habitan en cada región.

Los últimos dos días fueron en el estado de Tlaxcala, pasando primero a Huamantla, otro pueblo mágico con mucha historia, donde los chicos conocieron el Museo del títere, el Museo de la ciudad y el Palacio Municipal. La última parada fue en el Parque nacional La Malinche, que incluyó la parte más demandante de la práctica. Está consistió en que cada alumno, de acuerdo a sus condiciones, realizó un ascenso a la montaña, que implicó un promedio de 6 horas de caminata, donde los que alcanzaron la cima, pudieron apreciar la nieve y el paisaje que regala el esfuerzo de subir a la quinta montaña más alta de nuestro país. A pesar del desgaste físico, durante toda la práctica los alumnos pudieron tener un acercamiento con espacios naturales, con las personas que viven y cuidan de ellas, tener actividades de sensibilización sensorial, así como conocer algunos datos históricos de cada sitio. Sin duda, una experiencia que les dejará muchos recuerdos.

 
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